04 febrero, 2010

Santiago, voy y vuelvo

Mi Santiago querido, descansarás de mis pasos unos días, no alcanzarás a extrañarme, y si así fuera, te dejo a mis amigos que gozan de tus calles tanto como yo.
Ansiosa y expectante me voy a conocer ciudades miles de años más antiguas que tú, te traeré harto que contar.
Si el destino me lleva a no verte más, sabes que en mi corazón estás a plenitud.